miércoles, 30 de septiembre de 2009

0 2111 0

Leer a Whitman,
parecerme a el
calcar su silueta en un bar lejano,
posiblemente inexistente,bumoso.
Arcano de desdicha,
de consumismo interior,
despojo lìrico.

¿He de vestir su lenguaje poètico
sin trastornar mis letras?
Es sòlo que , no quiero yo mi escritura depuesta.

¿Acaso llegarà una dictadura sùbita?
La inserciòn depalabras en las que ya poseo?

Necesito el caos, es ese mi retazo de orden del universo.

Claro, participaré en el concurso de poesìa y eso me debate por dentro


3 comentarios:

Manduco dijo...

"El que alguna de las últimas poesías sea convincente, no quita importancia al hecho de que las compongo con creciente indiferencia y renuencia." C.pavese

danaepegasus dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
danae dijo...

la poesía como màquina cyborg y sus propios engranajes.Indestructibes.Clásticos.
Cuando escribir se vuelve rutina deja de ser, en esencia.